INCREÍBLE CÓMO ha cazado mi gato Broma una mosca gigante. Este gato mío no es buen cazador, al contrario que mi gata Lorca, pero cuenta con una energía inagotable y es muy constante en su caza. Cuando ha aparecido la mosca ha tratado de atraparla de un zarpazo, pero ha fallado y lo ha vuelto a hacer seis, siete, ocho veces, de modo que la mosca ha comenzado a agotarse y a posarse, pero Broma apenas le dejaba tiempo para descansar porque ¡zas! de nuevo aparecía con su zarpa y de nuevo fallaba. Al final ha ganado por agotamiento: después de quince minutos de persecución, que para una mosca es como hacer el Tour de Francia al completo, la misma que al principio volaba a la velocidad de Lewis Hamilton ya no podía con el alma... ¡y Broma la ha cogido con la boca, sin ningún esfuerzo! Una vez cazada, se la ha llevado a la salita y allí no sé qué habrá hecho con ella.